Por razones desconocidas, o bien ellos son capaces de atravesar con sus "naves" esos modos de vibración o bien existen fallos en esos espaciotiempo que nos permiten verlos y ellos a nosotros, produciéndose así el contacto o el encuentro cercano.
Por razones desconocidas, o bien ellos son capaces de atravesar con sus "naves" esos modos de vibración o bien existen fallos en esos espaciotiempo que nos permiten verlos y ellos a nosotros, produciéndose así el contacto o el encuentro cercano.