INTRODUCCIÓN Y DESARROLLO DE LAS IDEAS BÁSICAS
Jiddu Krishnamurti, es un personaje fascinante tanto por su pensamiento, como por su biografía. Vamos a ver en primer lugar un poco su biografía que es muy interesante y te hace pensar de verdad que nuestro destino está escrito o determinado de alguna manera. Seguidamente veremos una parte central de su pensamiento que es lo que yo llamo teoría de la fragmentación. Él lo llama así también o muy parecido. Veréis que en el fondo se parece al budismo, pero es bastante diferente.
Krishnamurti nació en la India, es Hindú y por lo tanto de una tradición budista e hinduista que hunde sus raíces en la reencarnación, tema que últimamente me interesa, porque no está todo dicho sobre ese asunto, me temo. Sin embargo Krishnamurti no era reencarnacionista.
Krishnamurti fue educado en la tradición ocultista occidental de la Sociedad Teosófica tanto que creían que era una especie de mesías como luego veremos. Sin embargo Krishnamurti no fue teósofo ni ocultista.
Hoy vamos a recorrer en primer lugar la vida de Krishnamurti uno de los pensadores más importantes del siglo XX.
Jiddu Krishnamurti Nació en 1895 en el estado de Madrás durante la dominación Británica de la India. Era un niño de salud delicada. Contrajo la malaria, con frecuentes recaídas. En la adolescencia, fue un joven soñador y sensible. Según palabras de él mismo, sus profesores y su padre le pegaban frecuentemente.
El padre de Krishnamurti estaba interesado en la Teosofía, y cuando se jubiló el dinero no le alcanzaba para mantener a su familia, así que tuvo que buscarse un trabajo. Comenzó a trabajar en la Sociedad Teosófica de una ciudad llamada Adyar. Así que toda la familia se trasladó allí y vivieron cerca de las instalaciones de la Sociedad Teosófica.
Y aquí aparece el primer personaje importante en la vida del joven Krishnamurti. Charles Webster Leadbeater un miembro destacado de la Sociedad Teosófica y muy interesado en lo oculto y de quien se decía que era clarividente.
Leadbeater estaba muy asombrado con Krishnamurti. Este hombre observaba a Krishnamurti en una playa cerca de las instalaciones de la Sociedad Teosófica, y veía en él un aura asombrosa, algo que nunca antes había visto, algo que estaba libre de todo egoísmo. Leadbeater estaba convencido que Krishnamurti iba a ser un gran maestro espiritual.
Es mas, llegó a afirmar que Krishnamurti sería un instructor del mundo. Un instructor del mundo es un avatar o un líder espiritual que llegan a la Tierra cada cierto tiempo para guiar la evolución de la Humanidad, o bien para rectificar el mal camino que pudiera llevar este planeta purgatorio. No es ninguna tontería esto del instructor del mundo. Incluso en los años 70 y 80 se estuvo anunciando su aparición.
Incluso en medios católicos muy conservadores y tradicionalistas se estuvo confundiendo a la figura del instructor del mundo con la del anticristo o un precursor del anticristo.
El caso es que a raíz de esta fijación de Leadbeater, fue como Krishnamurti empezó a ser instruido, junto con su hermano pequeño, por la Sociedad Teosófica y fue educado e instruido para ser el instructor del mundo ni mas ni menos.
Krishnamurti fue trasladado para continuar sus estudios en Europa En 6 meses ya estaba hablando inglés perfectamente y pudo imbuirse de todas las ideas aportadas por la Teosofía. En el año 1911 la Sociedad Teosófica creó la Orden de la Estrella, con la intención de preparar al mundo de la llegada del nuevo maestro.
Y ese nuevo maestro sería Krishnamurti. A Krishnamurti se le instruyó en numerosas materias. Y en materias que estaban sólo destinadas a muy pocos. Pero lo cierto es que a Krishnamurti no le interesaba la educación. De hecho, dejó la universidad después de varios intentos.
Pero se hizo mucho hincapié en su imagen pública. Y la verdad es que en ese tema se defendía bastante bien, y se defendía muy bien con los idiomas.
Todo esto hizo que Krishnamurti se irritara un poco, no le gustaba toda esta publicidad.
No le gustaba estar en boca de todo el mundo, no le gustaba la imposición en los estudios, y comenzó a tener dudas sobre su papel como nuevo maestro, como avatar de la humanidad, como instructor del mundo. Ese mismo año, en 1911, él y su hermano Nitya fueron por primera vez a Inglaterra.
Y fue allí cuando dio su primer discurso ante la Orden de la Estrella de Londres. Krishnamurti tenía 16 años. Y fue cuando empezaron a aparecer escritos suyos en ciertos folletos de la Sociedad Teosófica y en varias revistas. Desde entonces hasta el comienzo de la Primera Guerra Mundial en 1914, él y su hermano viajaron por varios países.
Fijaros que simplemente por la corazonada del teósofo Leadbeater, por haberse quedado obnubilado con la imagen de Krishnamurti, la sociedad teosófica, que ya tenía muchos años y un prestigio, estaba echando el resto y apostándolo todo a la figura enigmática y problemática de un joven hindú de sólo 16 años.
Lo lógico sería pensar, que Krishnamurti y su familia serían manipulados y forzados a servir al los fines de la Sociedad Teosófica, a cambio de una vida cómoda y para el joven hindú también gloria, honores y muchos dinero.
Pero lo que son las cosas. Krishnamurti, un hombre contra el destino, una figura que no tenía nada que perder, que nada podía oponer a la todopoderosa Sociedad Teosófica, resulta que les saldría rana como veremos mas adelante.
Y fue en esos años cuando Krishnamurti, recibió una cantidad de dinero de una benefactora, que hizo que por primera vez tuviera independencia económica. Cuando terminó la guerra, Krishnamurti dio muchas conferencias y tuvo muchos encuentros en muchos países del mundo. Escribía mucho, y el contenido de sus conferencias estaban muy relacionadas con trabajos en la Orden de la Estrella, y la intención de revelar al mundo la llegada del nuevo Maestro, del instructor del mundo, de Maitreya. A los 26 años llegó el amor en la vida de Krishnamurti. Se enamoró de una joven de 17 años, una joven estadounidense, pero Krishnamurti se dio cuenta de que su vida, la misión que tenía en la vida, no era compatible con mantener una relación con una pareja normal.
Así que, poco a poco esa relación se enfrió. En esos años Krishnamurti se trasladó a la localidad de Ojai, en el estado de California, en Estados Unidos, ya que su hermano estaba enfermo de tuberculosis, y pensaban que el clima de allí le vendría muy bien.
Allí conoce a Rosalind Williams, cuya familia estaba muy involucrada dentro de la Sociedad Teosófica, y quien tendría un papel muy importante en la vida de Krishnamurti. Incluso con ella tuvo una relación romántica durante años, algo que se supo posteriormente.
Así que Krishnamurti compró una casa allí, y allí estaría su residencia oficial. Ahí, en Ojai, el verano del año siguiente, cuando Krishnamurti tenía 27 años, fue cuando tuvo lugar un cambio muy importante en su vida. Tuvo ciertas experiencias de despertar espiritual y transformación psicológica.
Y esto llego a ser una constante, algo que se repetiría en él a lo largo de toda su vida. Cuenta que sentía algo como un dolor en la nuca, solía perder el apetito, incluso podía perder el conocimiento. Aunque según sus propias palabras, siempre era consciente de todo lo que pasaba a su alrededor. En ese estado tuvo una experiencia de unión mística. La experiencia de sentirse él dentro del Todo, y cuando esto le pasaba, al día siguiente sentía una inmensa paz.
Según lo que decía, el sentía como que estaba en otro mundo, y más allá de todo pensamiento. Su sensibilidad aumentaba considerablemente. Decía que la hierba era asombrosamente verde, los colores eran intensos. Y decía que esto a veces le pasaba inesperadamente, aunque estuviera tranquilo.
Y ocurría de una manera muy serena. Decía que esto es algo que está ahí, lo quiera uno entender o no, lo cierto es que está. Bueno, pues hasta ese momento, toda su preparación había estado planeada por los grandes personajes del mundo de la Sociedad Teosófica de aquella época.
Pero tuvo lugar algo nuevo, algo le llegó a él mismo que no estaba planeado, estas vivencias de Krishnamurti fueron utilizadas por la Sociedad Teosófica para manipular y seducir aún más a sus seguidores, sobre la idea de la venida de un avatar, maestro del mundo, instructor del mundo o Maitreya.
Intentaron imponer el estatus de Mesías a Krishnamurti. Pero Krishnamurti se rebelaba contra esos intentos. Posteriormente murió su amigo y compañero del alma. Su hermano Nitya. A pesar de estar enfermo de tuberculosis como vimos mas arriba, su muerte fue inesperada. Y fue un inmenso mazazo para Krishnamurti.
Tuvo como consecuencia que dejó de creer en la Teosofía de repente. Dejó de creer en los líderes de la Sociedad Teosófica. Éstos le había garantizado la salud de Nitya, y Nitya murió. El dolor de Krishnamurti duró 12 días. Después, ese dolor desapareció.
Se mostró extrañamente tranquilo, y libre de toda emoción por la muerte de su hermano. Krishnamurti siguió trabajando, poco a poco, cada vez se iba alejando mas de la Teosofía. En el año 1929, con 34 años, decidió abandonar la Orden de la Estrella.
Así que, la Orden de la Estrella se disolvió. Según sus propias palabras: La verdad es una tierra sin caminos. No puedes acercarte a ella por ningún camino, religión o secta.
No quiero seguidores, porque en el momento que sigues a alguien, dejas de seguir a la Verdad. Algunos miembros cercanos a él, de la Sociedad Teosófica, le dieron la espalda. Y se desvinculó completamente de ella, de esa Sociedad.
Renunció a todo el dinero vinculado con la Orden de la Estrella. Y devolvió todo el dinero, tanto el dinero como las propiedades, que habían sido recaudadas en ese tiempo. Así que sus enseñanzas tomaron otro rumbo. Cuidado que le habían dado hasta un castillo en Holanda. Y grandes cantidades de dinero.
Krishnamurti empezó a participar en numerosas giras donde daba conferencias, a publicar libros y artículos. Montó su nueva base de operaciones estaba en Ojai, California. Estamos en la década de 1930, Krishnamurti da conferencias en Europa, en América Latina, India, Australia y Estados Unidos. Mostró su preocupación por el inminente conflicto en Europa, la Segunda Guerra Mundial.
Su postura se interpretó como pacifista y subversiva. Y estuvo un tiempo bajo la vigilancia del FBI. Fue un tiempo que no dio conferencias, y permaneció en Ojai escribiendo. Cuando todo pasó reanudó sus charlas.
Hizo una gira de conferencias en la India, algo que atrajo a numerosos intelectuales jóvenes. Allí conoció a Iyengar, uno de los mejores profesores de yoga del mundo.
Quien enseñó esta práctica a Krishnamurti, También conoció al primer ministro Neru. Y con las reuniones que hizo con él elaboró la enseñanza que dice que: La compresión del yo sólo surge al observarse a si mismo en relación con las personas, las ideas, las cosas, la naturaleza y el mundo que te rodea.
En la difusión de sus enseñanzas cabe destacar a David Bohm. Un importante físico con el que hizo muchas exposiciones. Hizo discusiones grupales durante casi 20 años.
Fueron trabajos que fueron grabados y muchos de ellos plasmados en libros. Fue un tiempo en que Krishnamurti mantuvo relaciones intelectuales con muchos académicos, muchos físicos y psicólogos.
En octubre de 1985, Krishnamurti visitó la India por última vez. Allí dio unas charlas que fueron como unas charlas de despedida. Mostró su preocupación por los avances de la ciencia, los avances de la tecnología, y los efectos que ellos tendrían en la humanidad.
También quiso que sus enseñanzas no se transmitieran sólo a académicos, sino que fuera para todo el mundo en general. Dijo que nadie había entendido lo que le había sucedido a él, pero podrían acercarse si vivieran sus enseñanzas.
Murió en 1986 con 90 años. Krishnamurti invitaba a todos a hacer una revolución psicológica. Hacer un cambio en las relaciones humanas. Y así un cambio radical en la sociedad. Es necesario un revolución en la psique de cada ser humano, y esta no puede ser provocada por ninguna religión, institución política o social.
Hagamos cada uno esa revolución en nosotros mismos. Y así podrá verse reflejado en el mundo. «Uno nunca teme a lo desconocido, lo que realmente uno teme es que lo conocido llegue a su fin»
Bueno, pues esto es un resumen de su vida mas o menos resumido. Fijaros que siendo bastante joven rompe con la gente de la Sociedad Teosófica que son los que, viniendo de Europa con dinero, y con la propuesta de presentarlo como Maitreya, lo sacan del arroyo, cubren todas las necesidades materiales de él y su familia y lo trasladan a occidente a empezar un nuevo despertar espiritual.
Krishnamurti está agradecido y colabora con ellos intentando corresponder y agradecer tanta generosidad para él y para su familia. Pero cuando hay un cambio, salta un resorte que pudo desencadenarlo la muerte de su hermano, Krishnamurti rompe la baraja y renuncia a Satanás sus pompas y vanidades. Esto suponía claro está un riesgo relativo de volver a la pobreza, pero al final fue lo mejor que podía ocurrir.
En este corto viaje del héroe que también se superpuso con la muerte del padre, Krishnamurti se convirtió en un hombre. No me cansaré de repetir la importancia para un hombre. Ojo, para un hombre, repito. No para una mujer, de completar esos dos hitos de iniciación:
– Matar al padre
– Emprender el camino del héroe
Cuidado que no son cosas fáciles. En mi caso logré matar al padre antes de que se muriera de verdad, pero aún no he conseguido emprender el camino del héroe, entre otras cosas porque ni creo que sea para mí, ni estoy seguro de que sacaría yo con el emprendimiento de ese camino y además estoy convencido de que el camino que llevo ahora me va a reportar mas beneficios.
Pero a veces la solución a muchos problemas y el crecimiento personal pasa por emprender ese camino del héroe. Krishnamurti sin duda lo emprendió. Con 34 años rompió con todo y con todos, quemó sus naves y su vida comenzó desde cero, excepto por una cosa. Todo para lo que se había preparado y todos conocimientos que adquirió.
Lo he dicho muchas veces en esta oscura y húmeda Cripta. Solo somos lo que hemos aprendido, los conocimientos y el crecimiento espiritual que hemos conseguido. El resto es contingente, prescindible, fungible, vano, engañoso y terriblemente decepcionante. Bienes materiales, influencia o poder sobre otras personas, el propio cuerpo y las posesiones, todo eso se desvanece con la ancianidad (si es que llegamos a ella) y la muerte.
Pero vemos cuál es el núcleo del pensamiento de Krishnamurti. Fijaros que es una filosofía fresca y nueva, basada, sin duda en los conocimientos que el ha adquirido y todas las escuelas de pensamiento que lo han influido.
Básicamente lo que Krishnamurti dice es que:
– El Pensamiento o proceso de pensar
– La forma en que se adquieren los conocimientos
Esas dos cosas crean separaciones, divisiones, fragmentaciones y eso produce contradicciones, problemas psicológicos, conflicto, violencia y sufrimiento en definitiva. O sea es algo malo y por lo tanto debemos evitarlo con cierta metodología. Y aquí hago un inciso. Krishnamurti no es un gurú al uso, no es de grandes e intrincadas metodologías ni de hace escuela muy cerrada. Es mas bien flexible y liberal en ello, precisamente porque no se adhiere a ninguna escuela de pensamiento, espiritualidad o religión alguna.
Entonces ¿Cómo conseguimos evitar esa división o fragmentación en el proceso de pensar y adquirir conocimiento que tan nefastas consecuencias puede traer?.
Pues la clave está en lo holístico. Un concepto bastante manoseado por la New Age. Lo holístico quiere decir, para que nos entendamos, ver las cosas como un todo unificado. Aquello tan manido de que todo somos uno y todo está relacionado.
Es decir lo que Krishnamurti propone para la humanidad, para los humanos, para todos nosotros, es adquirir un conciencia holística. Ver la realidad como un todo integrado. Sería, desde mi punto de vista, lo contrario de la filosofía Hegeliana del proceso dialéctico del pensamiento. Ya sabéis como funciona el proceso dialéctico de pensar. Yo pienso en algo, ese algo sería la tesis, lo que estoy pensando. En el mismo momento en que he aprehendido la tesis, surgiría la antítesis y de la confrontación de ambas surgiría un resumen o destilado o mínimo común múltiplo de todas esas ideas, que sería la síntesis.
Dicha síntesis pasaría a ser la nueva tesis y el proceso volvería a comenzar y no tendría fin. El corpus de conocimiento humano, sería la suma de todos esos destilados, tesis-antítesis.
Un ejemplo en la historia de la filosofía moderna sería el racionalismo de Descartes, haciendo de tesis, que tendría su antítesis en el empirismo de Hume y la síntesis de los dos sería la filosofía kantiana.
Según Krishnamurti, este proceso de adquirir conocimiento y de pensar muy típico de Occidente, sería una fuente de división. Podemos ver que así es. La dialéctica es pura división. Krishnamurti promueve todo lo contrario. La realidad no se divide en un proceso infinito dialéctico de parejas tesis-antítesis sino que esa realidad hay que aprehenderla de modo holístico, en su totalidad, de una sola vez. Hay que observar la realidad sin prejuicios y de forma completa y unitaria.
Vamos a ver ahora que pensaba Krishnamurti sobre el tiempo. El objetivo es que para captar aquello que es atemporal, Krishnamurti profundiza en el concepto de tiempo.
Para deshacernos de la esclavitud del tiempo, tenemos la necesidad de comprender el tiempo como un todo no de forma parcial o fragmentaria. Hay que comprender que nuestra vida transcurre principalmente en el tiempo. No en el tiempo de la secuencia cronológica de los minutos las horas, los días y los años sino en el sentido de la memoria psicológica. Vivimos en el tiempo. Somos el resultado del tiempo. Nuestra mente es el producto de muchos ayeres y el presente es el simple transcurrir del pasado hacia el futuro.
Nuestras mentes, nuestras actividades, nuestro ser se basan en el tiempo. Sin el tiempo no podemos pensar porque la memoria es tiempo y sin memoria no hay
Pensamiento.
Debemos diferenciar dos clases de tiempo: el tiempo cronológico y el tiempo psicológico. El ayer como el tiempo de reloj y el ayer como recuerdo. No podemos negar el tiempo cronológico, hacerlo sería un absurdo; ahora bien existe realmente otro tiempo aparte del tiempo cronológico. Es evidente que hay un tiempo como el ayer pero existe ese otro tiempo que surge cuando la mente piensa, es decir existe el tiempo aparte de la mente.
Es evidente que el tiempo psicológico es un producto de la mente. Si no interviene el pensamiento, no existe el tiempo psicológico. El tiempo psicológico es un simple recuerdo. Se trata del ayer que en conjunción con el presente, configura el mañana o sea cuando el recuerdo de la experiencia de ayer da respuesta al presente crea el futuro lo cual sigue siendo un proceso del pensamiento, una intervención de la mente; el proceso del pensamiento genera continuidad psicológica en el tiempo, pero es algo real tan real como el propio tiempo cronológico y podemos utilizar ese tiempo que es la mente como medio para comprender lo eterno lo atemporal.
La felicidad no pertenece al ayer. La felicidad no es un producto del tiempo. La felicidad siempre es del presente es un estado atemporal. No sé si os ha pasado alguna vez que habéis estado particularmente felices, serenos y satisfechos. Un estado especial de júbilo. Justo en ese momento el tiempo no existe. Solo existe el presente, ese presente Inmediato. Pero después de esa experiencia de felicidad en el presente la mente la recuerda y desea darle continuidad acumulando cada vez más y más.
Ese tiempo es poseer y a la vez soltar lo cual sigue perteneciendo a la mente por consiguiente. Esto es muy difícil de explicar pero, en resumen, Krishnamurti viene a decir que, disciplinar la mente en el tiempo condiciona el pensamiento dentro del marco del tiempo, que es memoria y que es evidente que eso no puede revelar aquello que es atemporal, que es justo lo que perseguimos.
Casi todos estamos acostumbrados a pensar que necesitamos tiempo para transformarnos. Soy algo y para cambiar lo que soy en lo que debería ser necesito
Tiempo, esto parece que tiene lógica. Si soy codicioso y la codicia me trae confusión antagonismo conflicto y desdicha, pues entonces para cambiar, transformarme y dejar de ser codicioso, que eso es malo, necesito tiempo.
Es decir considero que el tiempo es un medio para evolucionar hacia algo más grande. Como esa situación no nos gusta queremos algo mejor, algo más noble, más idealista por tanto deseamos transformarnos porque sentimos dolor, incomodidad, conflicto pero superaremos el conflicto con el tiempo.
Si digo que lo superaré con el tiempo sigo estando en conflicto puedo decir que me llevará 20 días o 20 años librarme de ese conflicto, cambiar lo que soy pero durante ese tiempo seguiré estando en conflicto por tanto el tiempo no producirá ninguna transformación cuando utilizamos el tiempo como medio para conseguir una cualidad una virtud o un estado del ser. Simplemente estamos posponiendo o eludiendo lo que debemos hacer.
Dicho de otro modo, resistir al conflicto que deseo vencer con el tiempo, es a su vez mas conflicto. El pensamiento de Krishnamurti yo entiendo que es difícil de pillar. Es muy hindú. Poco tiene que ver con las filosofías occidentales, mas prácticas, a las que estamos acostumbrados en Occidente. Hay que hacer cierto esfuerzo. Yo creo que le he cogido el truco, pero quizá la dificultad es en lo que dice el propio Krishnamurti, que hay que ver las cosas como un todo incluido el propio proceso de ver y de pensar. Todo es todo.
Para comprender algo, cualquier problema humano, ¿qué es lo importante?. Lo
esencial una mente en calma de verdad. Una mente dispuesta a comprender, que no sea exclusivista ni trate de concentrarse lo cual sigue siendo un esfuerzo de resistencia.
Si realmente desean comprender algo de inmediato, entonces se produce en la mente un estado de quietud. Cuando quieren escuchar música o contemplar un cuadro que les gusta, que les impresiona, entonces el estado de la mente es de calma.
En ese instante la mente estará en quietud, cuando dejen de depender del tiempo como medio de transformar lo que es y debido a que están interesados en comprender, de forma natural su mente pasará al estado de quietud, y en ese estado de la mente surge la comprensión. Pero mientras la mente siga en conflicto, censurando, resistiendo, condenando; no podréis comprender. Cuando la mente está en calma, en paz, se produce una transformación.
Cuando la mente deja de resistirse, de evadirse, de desentenderse o culpabilizarse de lo que es y observa pasivamente y por completo, entonces desde esa pasividad de la mente si de verdad se investiga el problema se, produce una transformación.
La revolución tan solo es posible en el presente, no en el futuro. La regeneración es hoy no mañana. Si ponéis esto en práctica, descubriréis, que de inmediato se produce esa regeneración, esa cualidad de lo nuevo, de lo renovado. Porque una mente que tiene interés, que quiere o tiene la intención de comprender, siempre está en calma.
La dificultad para la mayoría, consiste en que no tenemos esa intención de comprender porque tenemos miedo de que si comprendemos se puede generar una acción revolucionaria en nuestra vida. Por eso resistimos y ese mecanismo defensivo es el que actúa cuando utilizamos el tiempo o un ideal para transformarnos gradualmente.
Así pues la regeneración de la que hablábamos al principio, solo es posible en el presente. No mañana, ni en el futuro. La persona que depende del tiempo como medio para lograr la felicidad para comprender la verdad, únicamente se está engañando a sí misma. Vive en la ignorancia y por tanto en conflicto.
Sin embargo la persona que se da cuenta de que el tiempo no es la solución a los problemas y en consecuencia está libre de lo falso como es lógico esa persona tiene la intención de comprender, entonces su mente está en una calma espontánea sin imposición sin práctica alguna. Cuando la mente está en ese estado de calma, en
Quietud, sin buscar ninguna respuesta o solución sin resistir ni evadirse tan, entonces, en ese momento puede haber regeneración, porque en ese momento la mente es capaz de percibir la verdad y lo que libera es la verdad, no el esfuerzo de uno por liberarse.
Bueno, he tratado de resumiros y explicar lo mejor que he podido, un aspecto fundamental del pensamiento de Krishnamurti, como es su sentido de lo que es el tiempo y que es muy útil para vislumbrar el resto de su filosofía.
No sé vosotros, pero yo no puedo estar mas de acuerdo con sus palabras. Me parecen de un sentido común y de una sabiduría impropia de un joven, que al fin y al cabo, ha construido su propio pensamiento desde cero, renunciando a toda contaminación de fuentes exteriores. Renunciando al ocultismo tradicional de Occidente de la sociedad Teosófica, pero también a las raíces de su propia cultura oriental de su país natal: La India.
Creo que hay una gran verdad en todo el pensamiento de Krishnamurti que se extendió y divulgó a través de toda una vida de conferencias, seminarios, charlas con físicos, psicólogos y sabios de toda la humanidad.
Indudablemente Leadbeater, de la Sociedad Teosófica, tenía toda la razón del mundo. Krishnamurti era un avatar espiritual, un instructor del mundo, probablemente fuera Maitreya, pero tuvo la humildad y la sabiduría para renunciar a la tentación de la soberbia, a la tentación de la avaricia sobre las riquezas que se le ofrecieron y que llegó a poseer y que devolvió a los que se la entregaron.
Esto solo puede venir de un espíritu superior, de un verdadero maestro, de alguien que de verdad merece la pena tomar tiempo en estudiar y poner en práctica sus enseñanzas. Luego tendrá razón en sus planteamientos o quizá no. Su sabiduría nos servirá para lidiar con nuestros problemas o quizá tendremos que seguir buscando, porque al fin y al cabo, Krishnamurti no es un dios, es un hombre, pero sin duda singular, elevado y poseedor de una gran sabiduría que se labró el mismo sin recurrir a ninguna escuela de pensamiento, siendo el suyo totalmente original.
RESUMEN DEL PENSAMIENTO DE KRISHNAMURTI
Jiddu Krishnamurti, un filósofo y orador indio, desarrolló la teoría de la fragmentación en el contexto de su exploración del pensamiento y la conciencia humana. Su enfoque se centra en cómo la mente humana, debido a sus procesos de pensamiento, crea una división interna y externa que lleva a conflictos y sufrimiento. Aquí se presenta un resumen de los principales aspectos de esta teoría:
1. **Naturaleza del Pensamiento**:
– Krishnamurti sostiene que el pensamiento es inherentemente divisivo. El proceso de pensar crea separaciones, categorizaciones y fragmentaciones dentro de la mente. Esto se debe a que el pensamiento opera en el tiempo y se basa en el conocimiento acumulado, que es fragmentario por naturaleza.
2. **División Interna**:
– La mente humana está dividida internamente debido a las distintas identidades y roles que asume. Por ejemplo, la separación entre el «yo» y el «no yo», entre el «observador» y lo «observado», es una fuente de conflicto interno. Esta división interna se manifiesta como contradicciones y luchas psicológicas.
3. **División Externa**:
– Esta fragmentación interna se refleja en el mundo externo como divisiones entre individuos, grupos, naciones, religiones y culturas. Estas divisiones son fuentes de conflicto, violencia y sufrimiento en el mundo.
4. **Unidad de la Vida**:
– Krishnamurti argumenta que en realidad, la vida es una totalidad indivisible. Las divisiones creadas por el pensamiento son ilusorias y no reflejan la verdadera naturaleza de la realidad, que es unitaria y completa.
5. **Observación Sin Fragmentación**:
– Una de las soluciones que propone es la observación pura y directa sin la intervención del pensamiento fragmentario. Esta observación debe ser sin juzgar, sin comparar y sin interpretar, permitiendo ver la realidad tal como es.
6. **Conciencia Holística**:
– Krishnamurti promueve la idea de una conciencia holística, donde uno puede ver la vida como un todo integrado. Esta visión holística surge cuando la mente está libre de fragmentación y puede percibir la unidad subyacente en todas las cosas.
7. **Libertad del Conocimiento Condicionado**:
– El conocimiento y la experiencia acumulados en la memoria, según Krishnamurti, condicionan y limitan la percepción. Para liberarse de la fragmentación, uno debe liberarse del conocimiento condicionado y experimentar cada momento de forma fresca y nueva.
En resumen, la teoría de la fragmentación de Krishnamurti describe cómo el pensamiento crea divisiones tanto internas como externas que son fuente de conflicto y sufrimiento. Propone la observación sin prejuicios y una conciencia holística como caminos para superar estas divisiones y alcanzar una percepción de la realidad más completa y unitaria.