Volvemos a la carga con este tema, que ya he tratado en al menos en este post, y también en este.
Creo, que los que me siguen, que a fecha de hoy son 539 solo en ivoox, vaya para ellos mi eterno agradecimiento, saben de sobra cuál es mi posición al respecto. Pero antes de volver sobre ello y para centrar mas el tiro, quiero que escuchéis lo que opina el investigador José Antonio Caravaca acerca del fenómeno OVNI, al cual, tantos años ha dedicado. Dice Caravaca:
«Los encuentros cercanos con OVNIS están más cerca de ser un constructo cultural orquestado por un fenómeno parapsíquico desconocido que de una visita real de seres provenientes de otros planetas…»
Insisto como lo hice en otros posts, que la obra de este investigador de la fenomenología OVNI hay que comprarla, leerla, anotarla y estudiarla. Si quiera por el carácter enciclopédico de la misma y su utilidad como referencia de una amplia casuística OVNI tanto en España como en el extranjero. Próximamente va a salir el segundo tomo de su obra.
Pero dicho esto, me parece muy lamentable que las horas de esfuerzo en escribir los libros y los años de investigación para lo único que sirvan sea para decir tonterías.
En primero lugar, la afirmación de Caravaca incumple una de las leyes básicas de la lógica y el sentido común, que tantas veces hemos explicado en esta web. Las explicaciones a los fenómenos paranormales o extraños no pueden ser mas paranormales o extrañas que el propio fenómeno a explicar.
Cuando Caravaca afirma que el fenómeno OVNI es un «constructo» cultural orquestado por un fenómeno parapsíquico «desconocido», en el fondo no está diciendo nada, o a lo sumo una tontería. No está diciendo nada porque el fenómeno OVNI ya es un misterio, ya es algo desconocido. Volver a decir que la base del fenómeno es desconocida, es repetir lo mismo.
Y vamos con la tontería. ¿Qué es eso de un constructo cultural?, ¿que el fenómenos depende de las épocas y de las culturas? ¿que depende del ojo que lo mira, de la mente que lo observa?. Eso no son mas que tonterías. Es hacerse trampas al solitario y voy a explicar por qué.
En la historia del pensamiento humano, hay un antes y un después con un filósofo en concreto que se llamaba Kant y que vivió en el s.XVIII. Hasta Kant, los pensadores filosóficos eran de las mas variadas escuelas y orientaciones. Los había realistas, racionalistas, empiristas, espiritualistas, en fin, toda una variedad de corrientes de pensamiento.
Pero todos ellos tenían algo en común. Todos ellos (quizá con alguna excepción), creían que existía una realidad ahí fuera. Parafraseando al agente Mulder, «la verdad está ahí fuera», todos los pensadores hasta Kant, eran realistas en el sentido de que pensaban que la realidad, la verdad, las cosas, los humanos, el cosmos, Dios, eran reales y estaban ahí fuera. Hasta Kant.
Y con este filósofo prusiano, Inmanuel Kant, el realismo se fue a hacer gárgaras. Con él empezó lo que conocemos como idealismo, que básicamente viene a ser, en diversos grados, que no está claro que exista una realidad ahí fuera. Que en cualquier caso lo que sea que percibimos, pasa a través de nuestros órganos sensoriales: las vista, el oído, etc. Qué esos órganos, son imperfectos, no captan toda la realidad y, muy a menudo, nos engañan, y que por lo tanto poco o nada se puede decir de la hipotética existencia de una realidad ahí fuera.
Esto puede parecer algo muy técnico, puede parecer que son palabras huecas, pero ha traído grandes problemas a la historia de la humanidad desde entonces. El idealismo se fragmentó en varias corrientes, y una de ellas dio origen a los movimientos totalitarios en Europa.
También, si al final todo está nuestra cabeza, también lo está Dios, ¿no?, es otra consecuencia del idealismo. De ahí que la religión sea el opio del pueblo, etc. Pero esto tiene un corolario inquietante, y es que si Dios solo existe en nuestras cabezas, y por lo tanto, es una entelequia, ¿Sobré qué fundamentamos la moral?. Todos sabemos que el comportamiento moral se basa en la existencia de Dios. Tenemos que ser hombres morales, portarnos bien en definitiva, porque hay un ser supremo, que en este caso es Dios, que nos compele a ello.
Si desaparece Dios, no hay moral, pero habría ética. Mejor dicho, habría muchas éticas. Porque claro, si todo está en nuestra cabeza, cabezas lo que se dice cabezas, hay muchas, y cada una de ellas alberga realidades diferentes, luego por lo tanto la visión de lo que está bien y lo que está mal, al final dependería de las opiniones libres y particulares de cada cual. Vemos así que la ética no sirve para nada, que es una entelequia. Hitler tenía su propia ética, lo que pasa es que era un poco distinta.
En fin, esto tampoco es una web de temas filosóficos. Es una web de misterio, pero he querido hacer este pequeño exordio para saber lo que es el idealismo. La explicación que proponen investigadores prestigiosos como Caravaca, pero también comunicadores de fama internacional como Iker Jiménez, que otorga al fenómeno OVNI la categoría de «cosa que ocurre dentro de nuestras cabezas» viene a ser haber transmitido el virus del idealismo a un ítem de misterio puro como los ovnis.
No todo está en nuestras cabezas. Eso son tonterías. Claro que todo el mundo tiene su propia óptica y opiniones acerca de las cosas que ve en el mundo. Pero eso no tiene nada que ver con el hecho de que el gran realista Aristóteles ya nos contaba hace 2500 años. Existe un mundo ahí fuera. Real, tangible, claro y distinto como decía Descartes. Parece mentira que haya que recurrir a filósofos antiguos y ya superados para explicar que dos y dos son cuatro.
Hemos retrocedido intelectualmente muchísimo. Es penoso ver que investigadores que han dedicado una vida entera al estudio de un solo fenómeno, que se han consagrado a el, puedan ser tan simplistas a la hora de dar un primer veredicto tras años de aprendizaje.
Si un fenómeno extrañísimo como el de los ovnis es capaz de dejar marcas en el suelo, quemaduras en la hierba, grabaciones de vídeo y audio, en cinta y en soporte digital, rastros grabados en el radar de barcos y aviones militares, si además ha atacado e interactuado con cientos de testigos, no puede estar en nuestra mente, y no puede ser que intentemos explicarlo como un fenómeno desconocido parapsíquico sin mas. El fenómeno es real, está ahí fuera, se ve, se oye, hay testigos, relatos, testimonios, pruebas a lo largo de la historia y abarcando todo el planeta tierra.
Otro tema es que cada persona individual ante el hecho de haber sido testigo de un avistamiento, le de el enfoque intelectual y la interpretación que Dios le de a entender. Faltaría mas, lo raro sería que los testigos no tuvieran una interpretación personal de lo que han visto. No serían humanos.
Pero eso no tiene nada que ver con el hecho de que la realidad existe y es exterior a nosotros. Por no hablar del fenómeno de los contactados. Recientemente he estado leyendo el libro communion de Whitley Strieber, y ahí se describen a la perfección los procesos mentales por los que pasa un contactado. Mas que contactado, un secuestrado por los supuestos extraterrestres.
De esos testimonios no podemos deducir nada, puesto que son precisamente subjetivos. Pero la medicina, la psiquiatría y la hipnosis son disciplinas científicas y tienen mucho que decir sobre el asunto de los secuestrados. Y lo que el libro de Strieber viene a decir, es que los abducidos por ovnis, presentan vamos a decirlo así, «grabaciones» en un su mente que responden a recuerdos reales.
Es decir, hoy existen tecnologías por las que se pueden inducir recuerdos falsos en un sujeto. No es fácil en absoluto, pero hoy día se puede. Se puede hackear la mente de las personas. Pero en los años ochenta no se podía. Y las experiencias de Strieber y otros no nos dicen nada de que hubieran podido ser sujetos pasivos de algún experimento militar, por ejemplo.
Así pues hay una causa externa, objetiva, real y desconocida, pero real que causó esos recuerdos. Para un idealista es suficiente con repetir el mantra de que todo está en nuestro cerebro y todo se mezcla y todo se confundo y todo vale. Pues no. Por cierto, si no habéis leído el libro de Whitley Strieber ya estáis tardando. Es un clásico indiscutible de la ufología y una lectura obligada.
El misterio de los contactados se superpone y amplifica a todo el misterio que envuelve a los ovnis. Hay que hacer los deberes, tener mas honradez intelectual, no buscar atajos ni hacer cierres en falso. Los ovnis son un misterio. Hay que buscar explicaciones, si, y yo también lo hago, pero hay que tener muy presente que es posible, incluso probable, incluso muy probable que jamás encontremos una explicación satisfactoria al fenómeno y que siempre siga siendo un misterio.
Menos mal que nos quedan investigadores honrados como Josep Guijarro o Vicente Fuentes, que apoyan la hipótesis extraterrestre como mas plausible para explicar el fenómeno OVNI. Yo no estoy muy de acuerdo con dicha interpretación del fenómeno, pero me parece perfectamente honrada y presentable. Lo que no me parece presentable en absoluto es pretender zanjar el tema con que todo son fantasías que están nuestras cabezas.
Pretender que todo está en el cerebro, es una enfermedad que no solamente aqueja al mundo de los ovnis, sino a casi todos los fenómenos paranormales, es decir, a casi todo el misterio. ¿Que soy testigo de un avistamiento?. Lo he soñado. ¿He contemplado una aparición en mi dormitorio?. Lo he alucinado. ¿He sido testigo de fenómenos telekinéticos?. No se lo que he visto,…y así con todo. Es una tentación sin duda para gente como Iker Jiménez que tiene tendencia a presentar un producto terminado.
Pero el misterio no es un producto terminado. Por algo se le llama misterio. Porque está inacabado, porque está abierto, porque es tangible, porque está ahí fuera. Pensemos por ejemplo en las caras de Bélmez. Se ha intentado asociar el fenómeno a la presencia del testigo principal que es una mujer llamada María Gómez Cámara, ya fallecida, que es la dueña de la casa donde se parecieron y aún permanecen, las caras de Bélmez conocidas como el mayor fenómeno paranormal de la Europa contemporánea.
Y yo eso, pues no lo niego, pero tampoco lo afirmo. Es cierto que las caras de han debilitado o difuminado desde que murió María, pero, como el misterio no es una ciencia deductiva, y las teleplastias forman parte del misterio, eso quiere decir, que de la muerte de María Gómez Cámara, no se puede concluir que el misterio de las caras de Bélmez vaya a concluir, aunque todo parece indicar que es así.
Ya he dicho por aquí mas de una vez que ahora mismo no creo en la hipótesis extraterrestre para explicar el fenómeno OVNI. Aunque, recientemente, un físico hispano llamado Alcubierre ha lanzado la posibilidad de que exista una forma de viajar por el espaciotiempo a velocidades increíbles pero preservando los postulados de la teoría especial de la relatividad, que dice que ningún objeto con masa puede alcanzar la velocidad de la luz.
Sin embargo, como dice el refrán, hay varias formas de despellejar a un gato. Si nada material puede viajar a la velocidad de la luz, quizá si pudiera plegar el espacio que me separa de otra galaxia a mucha mas velocidad. Esto es lo que propone Alcubierre, además justificándolo científicamente.
Pero incluso esa idea ya es vieja. En el cine, en la película DUNE, hay un planeta llamado arrakis donde habitan unos gusanos gigantes que se desplazan por un desierto de dunas gigantesco. Esos gusanos producen una sustancia, que se llama: la especia. Esta especia permite plegar el espacio y viajar por todo el universo a velocidades prácticamente instantáneas.
Es decir, existiría un medio, que excede nuestra tecnología, pero posible y realizable para civilizaciones mucho mas avanzadas que la nuestra, de viajar por el espacio. Esto explicaría muchas cosas sobre los ovnis que los escépticos como Caravaca o Jiménez, no han caído en ello.
Con esta tecnología la hipótesis extraterrestre se refuerza. Lo importante no es el vehículo, sino la tecnología de desplazamiento. Si yo quiero ir a un planeta a muchos millones de años luz, incluso en otra galaxia, solo necesitaré plegar el espacio hasta situarme en órbita de dicho planeta. El vieja será instantáneo, y la nave lo único que le exigiremos es que aguante una estancia en órbita cercana, y como mucho un aterrizaje, lo cual entra dentro de nuestra tecnología.
Si colonizamos ese planeta, ni siquiera hará falta nave, pues el destino final del viaje sería un hangar en tierra. Entonces cualquier vehículo que cumpla la condición de que cierre herméticamente podría hacer el viaje. No necesitaría motores, ni sistemas sofisticados ni nada. Podría ser incluso de madera, del tamaño de un coche o tener cualquier forma. Simplemente aparecería en el planeta de destino, posado en tierra o en cualquier lugar.
Y eso precisamente es lo que ocurre con muchísimos avistamientos ovni. Bueno, pues ahí tenemos una pequeña hipótesis que refuerza la HET y que se debería de investigar. Personalmente opino que el origen del fenómeno OVNI es espiritual. Otros seres son los que nos visitan en determinados vehículos. No vienen de ningún planeta y vienen de todos, porque emergen de su mundo espiritual y pueden viajar por el cosmos a voluntad. No les afectan las leyes físicas. Sus vehículos podrían ser solo símbolos u objetos que usan para manipularnos mentalmente, pero son reales, muy reales como los seres que los pilotan.
Esta idea, esta hipótesis, explicaría también muchos fenómenos relacionados con el mundo OVNI. Por ejemplo:
- La heterogeneidad y disparidad de vehículos
- las razas de humanoides
- las abducciones
- los contactados
- la hostilidad de los aliens
- la falta de un mensaje claro por parte de los aliens
Y así podría estarme horas hablando. Desarrollaré mucho mas esta hipótesis espiritualista en un futuro post. Os invito a pensar por vuestra cuenta. Recordad que es gratis y los resultados son sorprendentes. Asimismo, si alguien tiene una experiencia o inquietud que comunicarme, relacionada con estos temas de misterio, puede hacerlo en el correo: zdoom@hotmail.es