Cuento del monje y el discípulo compasivo
Bueno, hoy tenemos un cuento que trae una gran enseñanza espiritual. Nos lo envía Yamir
Bueno, hoy tenemos un cuento que trae una gran enseñanza espiritual. Nos lo envía Yamir
Petronio, el discípulo de Santo Tomás en este siglo XXI, me hace llegar una enseñanza que puede sernos muy útil para entender y aceptar ese momento por el que todos, grandes y pequeños, ricos y pobres vamos a pasar un día. Unos antes y otros después. Unos de grado y otros por fuerza, a la fuerza ahorcan dice el refrán español. Todos moriremos.
He recibido un mail desde Roma, que me envía Petronio. Tras rezar Laudes, ha sentido una moción del Espíritu de Dios y ha querido aclararme los conceptos muy importantes de
1) La Santísima Trinidad
2) La Encarnación
Petronio me ruega que os advierta que es indispensable conocer estos dos misterios para salvarse. Si no queremos ir al infierno, es necesario conocer estos dos misterios.
A veces, las cosas más simples pesan como enormes piedras que vamos colocándonos encima.
Una sobre otra, desafiando la ley de la gravedad en un equilibrio perfecto sobre nuestras espaldas; siendo éste un equilibrio incierto, porque sin conocer el número exacto de piedras, notamos la carga.
Cada vez más grande. Cada vez más pesada.
El cuerpo es una gran farmacia y ha evolucionado a través de miles de años de evolución.
Dondequiera que el pensamiento vaya, va una molécula, así que si estás experimentando tranquilidad, tu cuerpo está produciendo valium…
Si tu cuerpo está experimentando dicha, tu cuerpo produce sistema inmunológico, que son drogas potentes y anticancerosas.
Como vemos existen muchas similitudes entre el Islam y el Cristianismo en cuanto al tema del Fin de los Tiempos. Quizá el Islam lo describa de forma mas poética, y el Cristianismo de forma mas alegórica, mas simbólica, y por tanto mas compleja de explicar, aunque con mas riqueza de contenidos. En cualquier caso hay muchas mas similitudes que diferencias.
Qué pensaría usted si:
Su hijo de diez años está preocupado. Está tan ansioso que no puede comer. Tan preocupado que no puede dormir. «¿Qué ocurre?», usted le pregunta. Él mueve la cabeza y se queja: «No tengo un plan de pensiones».
UNANIMIDAD DE LA IGLESIA SANTA DE DIOS VALIÉNDOSE DEL FUNDAMENTO ESCRITURÍSTICO ES QUE EL DEMONIO Y LOS DEMONIOS EXISTEN Y QUE PERTENECE A LA DOGMÁTICA DE LA IGLESIA.
«QUIEN NEGASE LA EXISTENCIA DEL DEMONIO Y LOS DEMONIOS Y SU ACCIÓN EN EL MUNDO SEA ANATEMA». (CONC. DE TRENTO)
«QUIEN NIEGUE LA EXISTENCIA DEL DEMONIO VA EN CONTRA DE LA REVELACIÓN DIVINA Y NO ESTÁ EN LA VERDAD DEL SEÑOR POR LO TANTO ES UN HEREJE». (PABLO VI)
Si buscamos la palabra egoísmo en el diccionario encontraremos que se la define como el
San Pablo había predicado con tanto vigor en Tesalónica sobre el misterio de iniquidad, que los tesalonicenses llegaron a pensar que los Últimos Tiempos eran ya inminentes. Por ello, San Pablo les da a conocer la existencia de un “obstáculo” (en griego katejon) que primero tiene que ser removido, para que entonces pueda manifestarse públicamente el Anticristo.